20 ene 2009

Estimado lector:

Puestos a ser optimistas quiero creer que si está usted leyendo esto es porque ha leído algo mío previamente y siente curiosidad por saber qué pretendo decirle. Si soy un poco más realista, y ya que puede que esta vez sea la primera vez que me lee, me gustaría saber lo que piensa; ¿Qué pensar al leer simples fragmentos de la vida de una persona? ¿Que qué pensaría yo? Realmente no tengo ni idea.

Cuando abrí este blog no sabía muy bien cómo tomarle las riendas; ni siquiera sabía si escribiría sobre mí o simplemente sobre cosas que me gustan. Poco a poco el blog ha ido tomando forma, la forma de cuaderno de bitácora en el que de vez en cuando, y solo de vez en cuando dejar alguno de mis pensamientos más relevantes; generalmente positivos aunque los dolores de cabeza tienen aquí un buen hueco. Hoy por hoy suceden tantas cosas y todas tan rápido que antes de quedarme embobado ante el mundo viendo como todas ellas pasan sin más prefiero invertir ese tiempo que perdería viendo todo pasar en calidad de vida; cosquillas en su cintura, miradas intensas o el roce de mi cara con su espalda conforman la baza de posibles inversiones, y en mi cama cotizamos al alta. Invierta donde invierta obtendré como beneficio una fuente de inspiración para seguir con lo mío. Mis días, mis letras. Parece que rozando los 19 (apenas 5 días quedan) encuentro por fin algo que no había encontrado antes y que, espero, me siga dando ganancias como hasta ahora. Creo que ya sé de qué va mi blog; de lo que siento realmente, de lo que me sublima de tal manera que necesito escribir sobre ello. De sus besos en todas sus facultades: intensidad, color, sabor, textura, ritmo, forma, tamaño, materia y nivel de perfección. De todo lo que tras esos besos quise quiero y querré escribir.

Por todo ello quería agradecerle que comparta conmigo estos momentos tan intensos, las sensaciones sublimes que experimentamos con las altas dosis de adrenalina, con el hervor de las hormonas acelerado al máximo o con unas caladas de tranquilidad. Porque no hay nada más satisfactorio en el mundo que recrearse contando al detalle una experiencia increíble. Por muchas más de éstas y por muchos lectores a quienes usted mismo incitará a leerme, quiero darle las gracias.

Sinceramente; Will

2 comentarios:

Anónimo dijo...

después de la descripcion d tus besos..
los echo de menos + que nunca

Mai Martins dijo...

JODER COMO TE ECHO DE MENOS... :(